Explorar la religión Wicca nos sumergirá en una disciplina fascinante que abraza el respeto hacia la naturaleza y las artes ancestrales. Creada por Gerald Gardner (1884 – 1964) en el siglo XX, la Wicca se fundamenta en los antiguos cultos de brujería de Hampshire, Inglaterra.
La Wicca rinde culto a una deidad masculina y otra femenina, y una de sus creencias clave es la reencarnación y las vidas pasadas. Este culto se basa principalmente en dos obras del autor Gerald Gardner: Witchcraft Today y The Meaning of Witchcraft.
Gardner afirmaba haber descubierto evidencias de un antiguo culto compuesto por un grupo de brujas, prácticas que habrían sobrevivido de manera secreta a lo largo del tiempo. Con estas premisas dignas de una película de terror, Gerald Gardner capturó el interés de personas en todo el mundo, ansiosas por conocer más sobre la religión Wicca. Ahora, exploremos algunos de sus principios fundamentales.
El primer paso para comprender esta religión sería sumergirnos en los libros publicados por este autor: Witchcraft Today y The Meaning of Witchcraft. Aunque la religión Wicca no tiene profetas, agrupa a asociaciones de brujas como el ‘Council of American Witches’.
En 1974, promulgaron sus principios básicos, los cuales podemos resumir en los siguientes puntos :
- Practican rituales para sincronizarse con la naturaleza, la luna y las mareas.
- Existe una fuerza superior que escapa a toda lógica, algo «más allá de lo natural».
- Sostienen que este poder reside dentro de cada uno de nosotros.
- Viven en armonía con la naturaleza y se esfuerzan por conservarla.
- El poder creativo del universo se divide en energía masculina y femenina.
- El Poder Creador está presente tanto en las personas como en la naturaleza.
- Ven el sexo como una fuente de placer, símbolo e encarnación de vida.
- Además, lo consideran como una fuente de energía que se utiliza en la magia.
- Existen mundos internos y múltiples dimensiones dentro de esos mundos.
- No reconocen ninguna forma de jerarquía autoritaria que les dirija.
- Crean en personas sabias que pueden enseñar y liderar.
- Respetan el conocimiento y la sabiduría.
- Consideran que la magia, la religión y la sabiduría son partes de un todo.
- La Wicca es una filosofía de vida en la que la magia es una parte integral.
- El término «bruja» no otorga automáticamente tal condición a alguien.
- No creen en herencias, títulos o ritos de iniciación.
- Viven con sabiduría y en armonía con la naturaleza.
- Afirmación y compromiso de la vida en una constante evolución.
- Desarrollo de la conciencia.
- Contribuyen al Universo que conocemos y desempeñan un papel en él.
La Wicca, una religión que surge de la reverencia y la inclusión
Los practicantes de la Wicca, conocidos como wiccans, no llevan a cabo rituales satánicos ni adoran al diablo. De hecho, no creen en nada diabólico, sino en el equilibrio de las cosas, sin la existencia de un ser castigador o perverso. Por esta razón, los wiccans no creen ni practican la «magia blanca o negra». En su lugar, tienen en cuenta las intenciones, que se manifiestan a través del Karma, de manera que cada individuo sabe cómo inclinar la balanza hacia el «bien» o el «mal».
En la Wicca, el pentáculo, una estrella de cinco puntas, no representa un símbolo diabólico, sino los elementos de la naturaleza: aire, fuego, agua y tierra. La punta que apunta hacia arriba representa al espíritu. En su conjunto, simboliza la conexión del individuo con todo lo que le rodea en la tierra.
Según las wiccans, la magia existe, pero se trata de la capacidad energética personal para influir en las cosas. Si se ejercita, se medita y se cultiva, uno puede ser capaz de transformar su propia realidad. Existen rituales, meditaciones y objetos que ayudan a cultivar el Poder Personal para alcanzar los deseos de uno. Entre estos objetos mágicos se encuentran los cuarzos, las piedras, las plantas, la luna y el sol.
Todos estos objetos poseen una carga energética que, con el poder personal de uno, puede transformar la realidad.
Los wiccanos, seres guiados por la sabiduría ancestral, se rigen por un enigmático y encantador calendario conocido como la «rueda del año». Mabel Luna, una resplandeciente y perspicaz profesora de las artes mágicas, nos revela que este calendario maravilloso está estrechamente vinculado con las estaciones del año y los venerados equinoccios y solsticios. En su esencia, el calendario se entrelaza con 13 noches mágicas llamadas «esbats» y 8 sagradas festividades conocidas como «sabbats». Durante los esbats, se celebra y honra a la brillante Luna llena con la llama de una vela danzante y atentas plegarias dedicadas a deidades de elección personal. Por otro lado, los sabbats son festividades que marcan los solsticios y equinoccios anuales, llenando el alma de los wiccanos de inmensa alegría.
Entre estos sagrados encuentros, encontramos el majestuoso Mabon, el equinoccio de otoño, cuya fecha sagrada, el 21 de septiembre, simboliza el amplio y exquisito Día de Acción de Gracias de las brujas. No podemos dejar de mencionar el magnífico Samhain, una celebración sumamente significativa para los wiccanos, que se lleva a cabo el 31 de octubre.
Este mágico evento marca la muerte simbólica del Dios del Sol y, en esencia, representa el comienzo de un glorioso Año Nuevo mágico.
