Saturno y Neptuno iniciarán su viaje retrógrado en Piscis en Julio de 2024. Esta experiencia cósmica nos invita a explorar la zona Piscis de nuestra carta natal, desentrañando los procesos de manifestación y preparándonos para cerrar un ciclo psicológico.
La danza celestial de Saturno y Neptuno en el cautivador escenario de Piscis, el místico y misterioso último eslabón en la rueda astral, sella con gracia el magnánimo viaje a través del zodiaco, dejando una impactante huella en su gran cierre.
- Saturno, retrógrado desde el 29 de junio hasta el 15 de noviembre 2024.
- Neptuno, desde el 2 de julio hasta el 7 de diciembre de 2024.
Juntos, coinciden en su retrogradación durante cinco meses. Buscarán el equilibrio entre los límites y la fusión, desafiándonos a determinar qué límites debemos establecer y cuáles debemos diluir para asumir plenamente nuestra visión adulta del mundo y manifestar nuestros ideales.
Esta oportunidad cósmica nos invita a reflexionar, reevaluar y transformar nuestra perspectiva hacia un nuevo nivel de autoconocimiento y autorresponsabilidad: mientras Saturno y Neptuno se sumergen en las profundidades de Piscis, nosotros también tenemos la oportunidad de sumergirnos en nuestro propio universo interior para crecer y evolucionar en armonía con las energías cósmicas que nos rodean.
El hecho de que toda esta dinámica se desarrolle bajo el influjo de Piscis añade una intensidad única al final de este ciclo.
Piscis, en sí mismo, representa el último paso en la rueda del zodiaco, antes de entregarlo todo y regresar a nuestra esencia. Este signo es responsable de cerrar la puerta al salir, lo que puede generar el caos característico cuando algo llega a su fin y nos vemos obligados a actuar precipitadamente o a prepararnos para partir dejando todo en su lugar.
Neptuno
- Retrógrado en Piscis, del 2 de julio extendiéndose hasta el 7 de diciembre 2024.
- Siendo el planeta regente de Piscis, su influencia se vuelve aún más poderosa al estar en su hogar. Ahora es el momento perfecto para tomar conciencia de la realidad, revisarla y conectarse con el camino hacia nuestros sueños.
- Neptuno representa el idealismo, la sanación y la espiritualidad. Es el símbolo de la empatía y el amor incondicional. Sin embargo, cuando retrograda, nos invita a cuestionar estos conceptos y examinar los errores que hemos cometido. Cada experiencia nos brinda la oportunidad de trazar un nuevo camino hacia nuestro bienestar y sanación interna.
Saturno
- Comenzará su viaje de regreso, retrocediendo desde el grado 19 hasta llegar al grado 12 el 15 de noviembre, cuando volverá a su movimiento directo. La retrogradación de Saturno en Piscis invita a una introspección de nuestras estructuras y bases de apoyo, bajo la lente pisciana de los sueños y fantasías.
- De esta manera, surgen reflexiones sobre nuestras bases y si están alineadas con nuestro mundo espiritual o nuestros sueños. También podemos examinar si las metas que nos proponemos en la vida son realistas o se ven enriquecidas por fantasías.
- Además, pueden surgir cuestionamientos acerca de las figuras de autoridad y la sorpresa de descubrir que, a veces, nuestros ídolos tienen sus propias debilidades.
En este momento de cierre, surgen nuestros miedos más profundos ante la incertidumbre de lo que está por terminar pero aún no ha comenzado. Es la crisis final antes de entregarnos a lo desconocido y disolvernos en el vasto océano de posibilidades. Juntos, nos ayudan a recoger los hilos sueltos, limpiar lo que ya no necesitamos y avanzar hacia nuevas dimensiones. O bien, podemos dejar que otros se encarguen por nosotros, y así dejar la casa sin barrer.
Cuando toda esta energía converge entorno a Piscis, manifestada a través de los arquetipos más imponentes, como Saturno y Neptuno, la certeza de que el fin de una era ha llegado se torna inevitable.
Nuestro ser interior será testigo de una notable metamorfosis debido a las influencias de Neptuno y las estructuras que nos traerá Saturno.
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