Las granadas que aparecen en el velo de La Suma Sacerdotisa no solo representan la abundancia obtenida a través de la iluminación espiritual, sino que también son un símbolo de la divinidad femenina. Representan la pureza imperecedera y virginal, pero no se trata de una pureza sexual, sino más bien hace referencia a la pureza del conocimiento espiritual, alejado de todo ámbito mundano y carnal.
Las granadas eran los frutos del inframundo para los antiguos griegos y romanos. Son una directa alusión a la historia de Perséfone o a la historia de Eva: la Diosa griega Perséfone se convirtió en reina del inframundo al comer semillas de granada y algunos dicen que la fruta prohibida que comió Eva en el Jardín del Edén no fue una manzana, sino una granada.
La aparición mitológica más famosa es la leyenda del origen de las estaciones, donde sus personajes principales son Hades, regente del Inframundo; Perséfone y su madre Demeter la Diosa de la fertilidad y abundancia en las cosechas. Las granadas son símbolo de lo imperecedero, al igual que las palmas (que también son símbolo de virginidad y victoria; a las vírgenes solía enterrárselas con una palma). Ambas frutas se encontraron tallados en el Templo de Salomón.
Representan el conocimiento secreto y renacimiento.
La Sacerdotisa al igual que Perséfone conoce lo oscuro del Inframundo y todo lo que hay bajo el Sol y su conocimiento es usado con sabiduría. Ella tiene en sus manos la Torah. Los judíos consideran que la granada es un símbolo de lo correcto porque tiene 613 semillas, mismo número de mandamientos (mitzvot) que se encuentran en la Torah, tal cantidad de semillas es símbolo de abundancia y fertilidad.
En la Sacerdotisa, la granada se mantiene como símbolo de fertilidad cuando se piensa en el conjunto de columnas y velo como una vagina con himen intacto con el potencial de traer nueva vida, por este motivo es que hay una clara referencia directa al papel juega la Luna en el tocado de la Sacerdotisa.
Como podemos ver, las granadas son pequeñas frutas poderosas. Están llenos de antioxidantes y ricos simbolismos: la fertilidad, el útero (ovarios), la abundancia y nuevas posibilidades.
En la baraja del tarot, la Sacerdotisa – Arcano 2 – tiene granadas en su tapiz y la Emperatriz – Arcano 3 – las tiene en su vestido (hablaremos de ello en otro artículo) para capturar sus energías creativas, reflexivas y femeninas. Ambas son el máximo símbolo de la procreación y la belleza femenina así como de la abundancia, la delicia, la fertilidad, la generosidad y la unión.
También son símbolos de la unión con lo Divino, así de unión con los demás.
