Aquel que trata de socorrer a una mariposa encerrada en su crisálida, lamentablemente la lleva a la muerte. El intento de auxiliar un brote a brotar de su semilla termina por arruinarlo. Quien busca despertar la conciencia en aquel que no está preparado, solo logra provocar confusión. Existen ciertos acontecimientos que no pueden ser asistidos, requieren que ocurran desde lo más profundo hacia el exterior.
El Colgado del tarot personifica el tormento interno, la batalla que agita las creencias y experiencias del individuo, el sacrificio de aquel que se niega a herir a otro. Este personaje actúa como un péndulo que no se inclina hacia ningún extremo, busca el equilibrio en movimientos sucesivos hasta encontrar el centro.
El Colgado aprende que los mundos internos existen y, por ende, se dirige hacia adentro, una revelación fugaz lo impulsa a cambiar sus prioridades materiales por las espirituales; aprende a renunciar a algo en pos de alcanzar sus metas.
Aunque todo parezca detenido, solo lo es en apariencia. En realidad, se trata de una prueba para tomar conciencia de que, incluso en momentos de aparente estancamiento, algo está gestándose.
Nunca estamos realmente «detenidos», siempre hay algo en movimiento, incluso si no lo percibimos. Aprovecha esa aparente imposibilidad de actuar, esa sensación de inmovilización, para reflexionar y planificar. No hay mejor momento para hacerlo. Cuando termine este período que consideras infértil, de interrupción y espera, ya habrás decidido qué camino tomar.
Ahora sientes que debes sacrificar algo para alcanzar un objetivo que has esperado por mucho tiempo. Pero, en realidad, ese sacrificio deja de serlo para convertirse en un esfuerzo que te brinda satisfacción.
Con El Colgado, todo parece estar suspendido en el tiempo, pero solo es una ilusión.
En realidad es una oportunidad para despertar y darnos cuenta de que, incluso en medio de aparente estancamiento, algo grandioso se está gestando en silencio. Empecemos cambiando nuestra perspectiva del mundo y de nosotros mismo.
Nada podremos lograr hasta que realmente creamos en nuestro propio potencial. Saturno es el padre de El Colgado.
¿Qué hacer?
Busca la calma. Intenta comprender la situación, cambiar tu perspectiva. A veces, no hacer nada es lo más útil. Observa cómo las circunstancias te muestran el bien oculto detrás de los aparentes problemas. Ámate y date el reconocimiento que mereces. No se trata siempre de cosas lujosas o difíciles de obtener. Las dificultades radican en cómo te percibes a ti mismo y en tu autoestima.
A veces, es necesario hacer una pausa y evaluar lo que has logrado hasta ahora, para determinar qué hacer después. Si no somos capaces de tomar esta pausa por nuestra cuenta, las circunstancias nos forzarán a hacerlo. Durante este tiempo de «suspensión», podemos ver la vida desde otra perspectiva y con mayor serenidad. A veces, las cosas son completamente diferentes a lo que creemos o deseamos.
Después de analizar y esperar a que las cosas progresen, un obstáculo puede convertirse en una ventaja. Un freno o una interrupción pueden ser vistos de manera positiva como una oportunidad de descanso, una tregua, o un tiempo de recuperación.
Para alguien evolucionado, no hay tiempo perdido.
